
Osmar tiene 42 años y los últimos 10 los pasó esclavizado en una estancia del distrito entrerriano de Tres Bocas. Allí lo obligaban a realizar trabajos forzados en el campo a cambio de una vivienda muy precaria que no tenía luz ni agua. “Sobrevivía matando animales del campo y tomando agua de pozo”, les dijo a los policías de la Federal que lo rescataron. Estaba desnutrido y en condiciones paupérrimas de salud. Su tratante, de 60 años, fue detenido, acusado de haberlo reducido a la servidumbre.
Por disposición del Juzgado Federal de Victoria, a cargo de Federico Martín, y con intervención de la Secretaría de Nicolás Beltzer, los procedimientos en la estancia del departamento de Gualeguay se hicieron luego de que se recibiera una denuncia de un grupo de vecinos.
Los denunciantes, de la ciudad de Víctoria, alertaron a las autoridades sobre la existencia de un hombre que era sometido a realizar trabajos forzados en actividades de cosecha y cuidado de animales en el interior de la estancia.
Así, el pasado 28 de octubre, a las 11, la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA llevó adelante dos procedimientos: uno en la estancia de Gualeguay y otro en Victoria.

Tras tareas de vigilancia y una investigación de campo, los especialistas de la unidad de Trata de Personas pudieron verificar la veracidad de las denuncias y determinar que la víctima estaba en una situación de “extremo sometimiento a la servidumbre”.
El hombre que lo esclavizaba era un encargado del campo que cumplía el rol de tratante.

Así, uno de los lugares allanados fue el predio identificado como Estancia Don Esteban, en el distrito Tres Bocas, donde rescataron a la víctima. El otro, un domicilio ubicado en Maipú al 300, en Victoria; donde detuvieron al explotador.
Osmar fue asistido por la brigada y fue puesto al resguardo del Programa de Rescate de Entre Ríos: presentaba un estado físico deteriorado por falta de alimento, explicaron fuentes del caso.

“Hace aproximadamente 10 años que cumplo órdenes de mi patrón”, comentó Osmar a quienes lo rescataron en relación al tratante. “Me hacía trabajar en el cuidado de animales y en la cosecha del campo”, agregó.
No había paga, solo un techo precario, sin agua ni luz y sobrevivía de lo que cazaba.

Tras el rescate, la víctima fue trasladada a la vivienda de un familiar para su recuperación, quedando bajo la observación de los profesionales del programa de rescate.
En tanto, el imputado, identificado en el parte como O.F.R., de 60 años, fue remitido al móvil judicial del Departamento Trata de Personas, donde se realizaron las diligencias de rigor antes de su traslado a la sede de la Justicia Federal de Victoria–Entre Ríos. Allí deberá responder por el delito de reducción a la servidumbre.



















