Trabajadores del Hospital Garrahan exigen “una instancia real de diálogo” y advirtieron sobre nuevas medidas de fuerza

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El conflicto entre el Gobierno y el personal del Hospital Garrahan sigue lejos de una resolución, y así lo hicieron saber los trabajadores del centro de salud pediátrico este viernes a través de un comunicado.

En el texto, leído en la puerta del hospital por Pedro Rinos, coordinador de la Unidad de Emergencias, se quejaron de “la falta de voluntad negociadora” del Gobierno y advirtieron que realizarán “nuevas medidas” de fuerza “si no se avanza en la apertura de una instancia real de diálogo”.

“Nos gustaría sinceramente estar compartiendo buenas noticias, como por ejemplo el éxito de un trasplante o la recuperación de un niño con cáncer. Pero lamentablemente volvemos a hablar para ratificar que el Hospital Garrahan continúa atravesando una crisis grave, persistente y cada vez más profunda”, iniciaron el comunicado “dirigido a toda la ciudadanía argentina” los trabajadores.

El personal del Garrahan denunció que “se han realizado dos reuniones formales, pero en ninguna fue posible establecer un verdadero espacio de diálogo”, ya que “en ambas oportunidades, las autoridades hospitalarias responsables de la negociación no se hicieron presentes”. Todo esto, “a pesar de la supuesta vigencia de la Conciliación Obligatoria”.

«El conflicto de los médicos residentes tampoco está resuelto. La semana pasada fueron intimados a cesar las medidas de fuerza bajo amenaza de sanciones. A pesar de las reiteradas solicitudes para establecer una mesa de diálogo, no fueron escuchados», señalaron en su carta abierta compartida en redes sociales por la Asamblea de Residentes del Garrahan.

Los residentes denunciaron que los intimaron a levantar el paro bajo amenaza de sanciones (Foto: Maximiliano Luna)

Por otro lado, insistieron en que “continúan las renuncias de personal altamente capacitado”, ante la situación de emergencia que atraviesa el hospital y los bajos salarios, por lo que “el agotamiento de los equipos de salud es extremo.

“Nos han solicitado datos y estadísticas que den cuenta de nuestro trabajo y los hemos entregado. Nos han pedido pruebas concretas de nuestra labor y también las mostramos. Entonces, ¿qué más debemos hacer para que se nos escuche?“, preguntaron.

Dejaron en claro en el comunicado que no desean volver a recurrir a medidas de fuerza, algo que consideran “doloroso” y “extremo”, pero afirman que “es la ausencia de respuestas la que empuja a esas decisiones”.

“Una huelga en el Hospital Garrahan no es como en cualquier otro lugar. Aquí, incluso en esas circunstancias, garantizamos la atención de los pacientes internados (actualmente, cerca de 500) y de todas las urgencias. Lo hacemos porque nuestro compromiso ético y moral así lo exige. Pero, una vez más, la falta de respuesta de las autoridades nos arrastra a una situación límite, que impacta directamente sobre el personal de salud y, en consecuencia, pone en riesgo la atención de los pacientes”, apuntaron.

Este miércoles, los trabajadores del Hospital Garrahan se movilizaron a Plaza de Mayo (RS Fotos)

Los trabajadores resaltaron que el hospital “trabaja de manera articulada con otros centros sanitarios y profesionales de todo el país para atender las enfermedades más complejas y graves” y que “la Argentina necesita del Garrahan”, pero también “ahora, el Garrahan necesita de Argentina”.

“Por todo lo señalado, nos dirigimos también a los miembros del Poder Ejecutivo, pero también del Poder Legislativo y el Poder Judicial y de las Gobernaciones Provinciales para recordarles que están ante una nueva oportunidad de demostrar que la salud de los niños, las niñas y los adolescentes de cada rincón de nuestro país realmente les importa, impulsando una ley de emergencia sanitaria pediátrica que se haga realidad”, solicitaron.

El equipo de profesionales dejó en claro que su “compromiso con la salud de la población pediátrica continúa inalterable”, aunque esperan “la recomposición salarial de todo el personal”.

“Por último, aclaramos que no responderemos a agresiones ni acusaciones sin fundamentos. A quienes las pronuncian, los invitamos a compartir un día, o al menos unas horas, de nuestro trabajo. Quizás, así comprendan la realidad que vivimos y puedan, con argumentos, rectificar sus dichos”, concluyeron el comunicado.

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