Virginia Giuffre, una de las principales denunciantes de los abusos sexuales cometidos por Jeffrey Epstein, murió por suicidio a los 41 años en Neergabby, Australia, donde residía con su familia, según informó su entorno. “Es con corazones totalmente destrozados que anunciamos que Virginia falleció anoche en su granja en Australia Occidental”, dijo la familia en un comunicado proporcionado a AFP por su agente. Giuffre fue una figura clave en el impulso de las investigaciones judiciales que llevaron a la condena de varios colaboradores de Epstein y alentó a otras víctimas a presentar sus propios testimonios.
La familia de Giuffre, en una declaración proporcionada a AFP, lamentó profundamente su fallecimiento y destacó su incansable lucha contra el abuso sexual y la trata de personas. “Perdió la vida por suicidio, tras ser una víctima de abuso sexual y tráfico de personas durante toda su vida. Virginia fue una luchadora incansable contra el abuso sexual y el tráfico. Era la luz que levantaba a muchos sobrevivientes”, señalaron en el comunicado. Añadieron que, aunque enfrentaba serios problemas de salud física, el peso emocional de su historia fue lo que finalmente se tornó insoportable. “En el final, la carga del abuso fue tan pesada que se volvió insoportable para Virginia”.
Giuffre fue reconocida por su papel central en los procesos legales relacionados con la red de tráfico sexual de Epstein, proporcionando a las autoridades información determinante que permitió la condena de su socia Ghislaine Maxwell en 2021 y contribuyó a investigaciones abiertas por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York.
Una infancia marcada por abusos y una juventud en situación de vulnerabilidad
Virginia Giuffre, criada mayormente en Florida, atravesó una infancia difícil. De acuerdo con NBC News, fue abusada por un amigo de la familia, experiencia que derivó en un periodo de inestabilidad durante su adolescencia, incluyendo situaciones de calle. Durante sus intentos por reconstruir su vida, conoció a Ghislaine Maxwell, quien, según Giuffre, la reclutó y la introdujo en el círculo de explotación sexual de Jeffrey Epstein, hechos que habrían ocurrido entre 1999 y 2002.
Además de relatar el abuso al que fue sometida directamente por Epstein, Giuffre denunció que fue traficada a otros individuos poderosos, entre ellos el príncipe Andrew del Reino Unido y el agente de modelos francés Jean-Luc Brunel. Estas acusaciones situaron a Giuffre en el centro del escándalo global que siguió a la detención y posterior muerte de Epstein. Giuffre acusó al fallecido multimillonario de utilizarla como esclava sexual.
Epstein, un financiero de alto perfil, murió por suicidio en 2019 en una cárcel de Nueva York mientras esperaba ser juzgado por cargos federales de tráfico sexual de menores. Maxwell, por su parte, fue declarada culpable en 2021 de cinco cargos relacionados con el tráfico sexual de menores.
Enfrentamientos legales de alto perfil y una lucha por la justicia
En 2021, Virginia Giuffre presentó una demanda federal contra el príncipe Andrew, alegando que el miembro de la familia real británica abusó sexualmente de ella cuando tenía 17 años. Aunque el príncipe siempre negó haber tenido relaciones con Giuffre, resolvió el litigio mediante un acuerdo económico confidencial en 2022, como documentó NBC News.
Giuffre también tuvo un rol destacado en el caso contra Jean-Luc Brunel, quien fue acusado en diciembre de 2020 de acoso sexual y violación de menores. En junio de 2021, Giuffre testificó en París durante un proceso a puerta cerrada, declarando su intención de “ser una voz para las víctimas” y asegurándose de que Brunel fuera llevado ante la justicia. Tras su testimonio, afirmó que había querido demostrarle a Brunel que “ya no tenía poder sobre ella”.
Brunel murió por suicidio en febrero de 2022 mientras estaba detenido en Francia. Su muerte, al igual que la de Epstein, dejó sin cerrar muchos de los casos en los que estaba implicado.
Problemas de salud y las presiones recientes que afectaron a Virginia Giuffre
De acuerdo con NBC News, en los últimos meses antes de su muerte, Giuffre experimentaba graves problemas de salud física, incluyendo insuficiencia renal. Sin embargo, su hermano, Danny Wilson, sostuvo que “el dolor mental era aún más severo” y que su hermana “empujaba con todas sus fuerzas para erradicar el mal”.
Además de sus problemas médicos, Giuffre enfrentó un entorno de estrés renovado debido a la liberación de documentos relacionados con Epstein durante el ciclo electoral más reciente en los Estados Unidos. Como informaron varias fuentes a NBC News, la fiscal general Pam Bondi entregó archivos vinculados al caso Epstein a figuras de los medios de comunicación conservadores y posteriormente los divulgó públicamente. Aunque los documentos contenían información mayormente conocida, el temor a la divulgación de datos sensibles afectó a muchas víctimas, aumentando la ansiedad y la angustia.
Legado de Virginia Giuffre y el impacto de su lucha pública
Desde su mudanza a Australia con su esposo y sus tres hijos antes del arresto de Epstein, Virginia Giuffre continuó trabajando en favor de los derechos de las víctimas de abuso sexual. Su abogada, Sigrid McCawley, la describió en declaraciones a NBC News como “una amiga querida y una increíble defensora de otras víctimas”. Su representante, Dini von Mueffling, añadió que Giuffre era “una de las personas más extraordinarias” que había conocido.
En una entrevista previa transmitida en un especial de Dateline NBC, Giuffre exhortó a las autoridades a escuchar a las víctimas: “Tómenos en serio. Importamos”, expresó, reafirmando su compromiso de dar voz a quienes, como ella, sufrieron en silencio durante años.
El nombre de Virginia Giuffre queda ligado a la lucha contra el tráfico sexual y la búsqueda de justicia para las víctimas de abuso, marcando un antes y un después en la visibilización de estas causas.